¿En qué consiste la Mini-Transat?
La Mini-Transat se celebra cada dos años y reúne a navegantes de todo el mundo que desean desafiar al océano en solitario. La travesía está dividida en dos etapas: una primera que parte desde Francia (habitualmente desde Les Sables-d’Olonne) hasta una parada intermedia en las Islas Canarias, y una segunda que va desde Canarias hasta el Caribe, finalizando en la isla de Guadalupe. En total, los participantes recorren cerca de 4.050 millas náuticas.
Las embarcaciones: los Mini 6.50
Lo que hace única a la Mini-Transat son las embarcaciones, conocidas como Mini 6.50. Estos barcos, con tan solo 6,5 metros de eslora, son pequeños pero increíblemente veloces y maniobrables, permitiendo alcanzar altas velocidades, aunque en condiciones de confort mínimas. La embarcación está diseñada para resistir las condiciones extremas del océano, pero, al ser tan pequeña, deja poco espacio para comodidades y apenas cuenta con la tecnología de los grandes barcos de regata.
Existen dos clases de Minis: los Prototipos, embarcaciones diseñadas específicamente para innovar y probar nuevas tecnologías, y los Series, barcos producidos en serie con requisitos más estrictos. Esta diferenciación permite a los participantes experimentar el desafío del océano en función de sus capacidades técnicas y presupuestarias.